martes, 25 de diciembre de 2012
Tendencias By JM: Un Perfume para cada tipo de Hombre
Tendencias By JM: Un Perfume para cada tipo de Hombre: Aunque cueste creerlo, desde la Edad de Piedra que el perfume es utilizado por los hombres. Cuál es la historia de una de las industrias ...
Un Perfume para cada tipo de Hombre
Aunque cueste creerlo,
desde la Edad de Piedra que el perfume es utilizado por los hombres. Cuál es la
historia de una de las industrias mundiales más rentables.
Los inicios de la
perfumería se remontan a la Edad de Piedra, cuando los hombres incineraban maderas
aromáticas para complacer con humo (per fumum) a sus divinidades. De ahí el
origen de la palabra.
No obstante, la
fabricación de perfumes para uso humano comenzó con los egipcios, quienes
fueron los primeros perfumistas artesanales de que se tiene noticia y que
lograron extraer aromas naturales de los más variados tipos.
Para que se tenga una
idea de cuánto avanzaron en ese sentido alcanza con mencionar que cuando se
abrió la tumba del faraón Tutankamon se hallaron más de tres mil potes con
fragancias que aún conservan su olor, a pesar de haber permanecido enterrados
por más de 30 siglos. Por aquellos tiempos las egipcias colgaban de sus cuellos
pequeños recipientes de barro con sustancias aromáticas y llegaron a creer que
el buen olor no sólo seducía a los hombres, sino que ahuyentaba las
enfermedades.
Con el tiempo, la
perfumería sufrió muchas transformaciones, hasta llegar a la producción
industrial y a la categoría de artículo de lujo con la que hoy se la conoce.
Uno de los
descubrimientos claves para llegar a esto fue el hallazgo árabe del alcohol, en
el siglo VIII. Aceites y resinas olorosas diluidas en el alcohol revelaron toda
la plenitud de sus cualidades aromáticas, dando así origen a perfumes mucho más
finos.
Un perfume para cada tipo de hombre
Elegir el perfume
que vamos a usar no es una cuestión menor. Por un lado, si bien es una elección
personal, su aroma será disfrutado y
compartido por quienes lo rodean. Por eso, al momento de ir en busca de la
fragancia que más nos conviene es necesario tener en cuenta algunos tips.
Antes de adquirir una fragancia es indispensable
probarla en nuestra propia piel. Nunca debe comprarse un perfume porque
recordamos como olía en otra persona ya que huele distinto sobre cada piel.
Para probar
un perfume
lo mejor es aplicarlo en la muñeca y en los dobles del codo, esperar 15 minutos
y volver a percibir el aroma. Recién en esta instancia se podrá estar seguro
que se trata de la fragancia buscada.
El perfume debe tener una relación directa con la personalidad de quien lo usa. En la actualidad, fragancias masculinas que se destacan por su refinamiento. Entre ellas el hombre encontrará la que mejor se adapte a su estilo.
El perfume debe tener una relación directa con la personalidad de quien lo usa. En la actualidad, fragancias masculinas que se destacan por su refinamiento. Entre ellas el hombre encontrará la que mejor se adapte a su estilo.
Tipos de perfume según
su concentración
Perfume: También
conocido como "extracto", es el más concentrado (del 18 al 20%). Se
presenta en frascos pequeños y su aroma es muy intenso. Se recomienda su uso
para la noche.
"Eau de
parfum": Contiene hasta un 15% de aceites aromáticos mezclados con
alcohol. Contiene las mismas esencias absolutas que se utilizan para elaborar
el perfume pero, como su concentración es más reducida, el precio es más
asequible.
"Eau de
toilette": Es la versión más ligera dentro de la familia de los perfumes.
Su concentración es de un 5% de aceites aromáticos en alcohol y de un 2% de
esencia. Su duración está entre 3 y 5 horas.
Que tener en
cuenta al elegir un perfume
El perfume que elijamos
formará parte de nuestra personalidad. Seremos recordados por ese aroma y, por
eso, es importante saber escoger qué perfume nos irá mejor. Vuelve a sentir su
aroma y entonces podrás decidir si te gusta o no.
Un perfume huele
distinto en cada persona, debido a los olores naturales que dependen de tu
alimentación, tipo de piel y estilo de vida. Por último, un consejo: cuando
vayas a elegir un perfume, procura no llevar ninguno puesto.
Un perfume de acuerdo a
tú personalidad
Extrovertido: para gente
dinámica y decidida, los aromas que mejor se acomodan son los florales, los
aromas frescos, la lavanda y los cítricos.
Introvertido: a las
tímidos y callados les va muy bien las fragancias orientales.
Elegante: para las
Hombres seguros de sí mismos, que siempre buscan el refinamiento y la
independencia, los aromas florales.
Alegre: si tu
personalidad es espontánea, simpático y alegre te convienen los aromas frutales
y florales.
Romántico: nada como los
aromas dulces, cálidos y orientales.
Madura y equilibrada: aromas frescos y naturales.
Madura y equilibrada: aromas frescos y naturales.
Discreto: aromas marinos
y frescos.
Como debes usar un perfume
Como debes usar un perfume
Es fácil, el perfume
debe aplicarse en las zonas donde "late" más tu corazón, como el
cuello, la nuca, el pliegue de los codos, las muñecas, detrás del lóbulo de la
oreja.
Aplicarlo en el cabello
es una buena idea y una muy mala idea es en la cara, sobre todo si eres de las
personas que saludan de beso en la mejilla, por favor ni se te ocurra pues al
que te bese le quedará el horrible sabor de tu perfume.
Como prolongar su
duración
Primero aunque tú no
huelas la fragancia, ésta sigue ahí y los demás si la perciben, no necesitas
bañarte en perfume, una poca cantidad es suficiente, a menos que tu piel sea
seca de esta manera si tendrás que aplicar un poquito más.
Si tu dieta es baja en
grasas, tu perfume durará menos tiempo
Los jabones, cremas o
lociones perfumadas pueden modificar el resultado final de tu fragancia. Será
mejor adquirir estos productos de la misma línea o en su defecto sin aroma.
Tips para que escojas el
que más se adecua a tú forma de ser.
Los perfumes estimulan al placer y son uno de los más efectivos afrodisíacos. Para ti, un perfume puede ser el regalo ideal, pero se pueden equivocar en la elección.
Los perfumes estimulan al placer y son uno de los más efectivos afrodisíacos. Para ti, un perfume puede ser el regalo ideal, pero se pueden equivocar en la elección.
El hombre clásico
A pesar de las modas, El hombre clásico mantiene sus propias formas; no es una víctima de las nuevas tendencias: tiene un estilo inalterable. Se destaca por su buena educación y detesta las estridencias.
Si tu lema: Sobriedad,
discreción y buen gusto.
Sus fragancias: Una
fragancia clásica y aromática, maderas orientales, un aroma fresco y elegante.
Para un hombre de gustos
refinados
Este rasgo puede encontrarse en hombres clásicos, tímidos, excéntricos o explosivos. Pero lo que marca su impronta es su agudo sentido de la estética. Para un hombre exigente que trata de rodearse de belleza en todo aquello que elige.
Este rasgo puede encontrarse en hombres clásicos, tímidos, excéntricos o explosivos. Pero lo que marca su impronta es su agudo sentido de la estética. Para un hombre exigente que trata de rodearse de belleza en todo aquello que elige.
Sí tu lema: Vivir es
sinónimo de buen vivir.
Sus fragancias: De
maderas orientales, un aroma refinado y casual para hombres con distinción y
estilo. Con tono de maderas orientales, diseñada para hombres elegantes,
aromáticos, originales, masculinos y sofisticados.
Fogoso y apasionado
Fogoso y apasionado
Nacido para seducir.
Su mundo es el mundo de
los placeres y allí quiere vivir y llevar a quienes quieran acompañarlo. Las elegidas
pueden estar seguras de que a su lado no existe el aburrimiento ni la rutina.
También deben estar siempre listas, para salir detrás de donde la imaginación
los lleve.
Si tu lema: ¿Existe otra
fuerza además del deseo?
Sus fragancias: maderas
orientales. Un aroma fogoso y provocativo para el hombre apasionado, aromático,
fresco y espiritual, para un hombre que vive con riesgo.
El hombre moderno
Se maneja con el lenguaje de las nuevas tecnologías; se inclina por los placeres del relax y la comida sana. Es un hombre informado y que tiene tiempo para todo; hace deportes y siempre tiene un CD con la última música.
Se maneja con el lenguaje de las nuevas tecnologías; se inclina por los placeres del relax y la comida sana. Es un hombre informado y que tiene tiempo para todo; hace deportes y siempre tiene un CD con la última música.
Sí tu lema: El futuro es
ahora mismo.
Tus fragancias: Una
fragancia cítrica y con actitud; ideal para climas cálidos, un clásico y
refrescante aroma que estimula y distingue masculinidad.
Si compartes con ella hasta el perfume...
Si compartes con ella hasta el perfume...
Está todo dicho.
Tu lema: Disfrutar es hacerlo entre los dos.
Tu lema: Disfrutar es hacerlo entre los dos.
Tus fragancias: Uno
cítrico, una armónica combinación entre brillo y sensualidad. Maderas
orientales, un aroma único e impredecible que se siente íntimo y cálido.
Y recuerda el perfume es
una prenda intima que refleja tu personalidad o lo que quieras demostrar.
Puede ser determinante para la conquista de una dama, funciona como afrodisíaco, también debes tenerlo en cuenta para una reunión de negocios, por ejemplo.
Puede ser determinante para la conquista de una dama, funciona como afrodisíaco, también debes tenerlo en cuenta para una reunión de negocios, por ejemplo.
Una vez que te conozcan con una determinada fragancia nunca debes cambiarla, ni alternarla.
El perfume huele de
distinta manera en cada persona, influye la epidermis, la temperatura corporal,
la secreción sebácea, y el ph de la piel.
Tampoco regales perfumes
a menos que alguien te pida algo especial, o como en un mutuo acuerdo acepte el perfume con el cual la quieras mimar
o recordar.
Puedes llegar a revivir
gratos recuerdos gracias a un aroma determinado, a veces sólo los efluvios de
un perfume hacen llegar a la memoria una serie de momentos intensamente
apasionados.
Hoy día la gran mayoría de
los diseñadores como así también grandes Celebrities han desarrollado sus
fragancias en base a sus aromas preferidos y personalidad.
Aquí, les dejo
fragancias que has desarrollado su historia, algunas que actualmente son un
boom, y otras que tal vez ya dejaron de serlo, pero que marcan una gran
personalidad en cada uno haciendo que todavía se sientan vigentes, como
experiencia propia les cuento que me pasa a menudo con Carolina Herrera
Classic, una fragancia que marco su historia, pero hoy con el desarrollo de nuevas
fragancias desarrolladas por la diseñadora, buscando diferentes estilos y
acorde a sus inspiraciones y colecciones, muchos han olvidado aquel aroma
irresistible de esta fragancia, que muchos se preguntan cuál es?, y esa es la
idea, mostrar nuestro estilo y personalidad a través de una fragancia.
Les dejo algunas imágenes
de aromas variados que pueden adoptarse a diferentes personalidades, hay
inmensa variedad, decidí mostrar muchos de los que ya conozco, algunos tal vez
con un poco de esfuerzo los consigamos en el mercado Argentino, tal es el caso
de Zegna, el cual es bastante complicado de conseguir, y Kenzo Air, el cual ya
se encuentra en extinción por decisión de la firma Kenzo, pero aquellos que
tengan la posibilidad de poder encontrarlo, no se van a arrepentir, aroma
sumamente fresco, personal, para una hombre activo y un porte de gran elegancia
marcando la masculinidad en todos sus aspecto incluso la frescura interna de
hombre.
También podemos
encontrar en el mercado, muchas fragancias nacionales a muy bajos costos y que
por su puesto también tienen ese dote de personalidad.
En la próxima nota
prometo mostrarles algunas de las que me resultan interesantes y a las cuales
podemos acceder con facilidad, y dentro de las mismas también encontrar
fragancias importadas de bajo costo y buena definición de personalidades.
Lo primero que se siente en las notas de cabeza es una nota fresca de menta, intensa en estilo de fragancia de los 80 como en Pasha de Cartier, más notas aromáticas generales en la familia de las plantas verdes de cocina (como semillas de cilantro o romero) y trazas de enebro cercano al pino verde. En notas medias la menta baja de intensidad aportando solo frescura, quedando el enebro como nota dominante y casi única, con trazas helechosas características de sus bayas y hojas. En notas finales retoma algo de la menta de la cabeza por encima del enebro, más tonos maderosos algo verdes y de presencia más clásica, coincidente con el cedro y musgo de roble declarado en el frasco de la fragancia.
Aunque es casi de mediados de la década del 90, rescata estilos de los ochentas sin parecer viejo... privilegiando los tonos aromáticos verdes del enebro y evitando otros tonos verdes viejos como el vetiver y el ambargris. Tiene características clásicas pero se siente un enfoque no viejo, algo joven para la época. El frescor es apropiado para el verano e invierno, agradable de diario y con una nota limpia y formal en oficina. De noche también tiene presencia pero es más relajada, suficiente para acompañar a una corbata pero con mejor desempeño a camisa abierta y una chaqueta de cuero. Las notas verdes aromáticas son masculinas y al sentirse no viejas cumplen con entregar cierto atractivo romántico y enigmático.
Black XS L?Excès pour lui / for him.
Un perfume de músico de rock. Amaderado, sensual y eléctrico, Black XS L Excès pour Homme es un perfume rítmico inspirado directamente en el universo del rock. La consigna de este perfume adornado con una calavera, el símbolo de un estilo rock elegante y ultra contemporáneo, es cultivar el exceso para vivir intensamente. Presentado como un amaderado aromático, Black XS LExcès se inicia con un efecto frutal aderezado de notas de limón y de lavanda. En el corazón se mezclan un acorde ozónico con una tonalidad amaderada ahumada de cipriol. La estela, más oriental, combina ámbar y pachulí. El perfume es menos suculento que el Black XS inicial. Perfumista: Fabrice Pellegrin, Firmenich.
EL FRASCO de Black XS se viste de negro y plateado. Una calavera y una rosa cuelgan del frasco como un piercing
Carolina Herrera es el primer perfume que lanzó esta diseñadora venezolana en 1998.
Es una fragancia que revela la esencia del estilo de Carolina Herrera.
Herrera para los hombres contiene lavanda, ámbar y almizcle. Las medio notas
son: ámbar, tabaco y geranio y la base de la fragancia son: sándalo, cedro y
almizcle
Es sus notas aromáticas altas, el perfume Carolina Herrera alberga los aromas del durazno, las flores del naranjo, las notas verdes, la bergamota y el palo de rosa brasilero. Mientras que las flores de la madreselva, el nardo indio, el jacinto, el jazmín, el ylang-ylang, los lirios del valle, el narciso y el jazmín español le dan las notas aromáticas medias al perfume Carolina Herrera. Las notas de base están a cargo de los aromas del sándalo, el ámbar, el almizcle, el civet, el musgo de roble, el vetiver y el cedro. El perfume Carolina Herrera es una fragancia elegante, sofisticada, atemporal y refinada.
Además, este perfume cuenta con una interesante línea de baño que incluye una loción corporal perfumada, un gel de ducha, una colonia y una crema corporal perfumada.
212 Colonia por Carolina Herrera, lanzado por la casa de Carolina Herrera en
1997, 212 se clasifica como restauración, fragancia florida. Este olor masculino
posee una mezcla de flores. Se recomienda para el desgaste de la oficina. La
fragancia encierra notas frescas, cítricas (pomelo y mandarina) florales (rosa y
peonía), sobre un fondo mezcla de cedro y sándalo
Esta fragancia, corresponde al complemento masculino de 212 con el cual esta serie pasa a entenderse como una variante estable y paralela al grupo 212 y 212 Sexy, con un enfoque publicitario de fiestas y de noche. El diseño del envase establece una nueva forma de frasco que escapa de las líneas cilíndricas de 212, con una botella rectangular de bordes redondeados y acabado plateado metálico en línea con el dorado de su par femenino, con la leyenda "Are you on the list" ("¿estás en la lista?" en español) en la caja como alusión a perfume o credencial de ingreso para gente muy importante de una fiesta. En el sitio 212AreYouOnTheList creado especialmente para estos perfumes se señalan que las notas aromáticas de esta fragancia son: caviar de lima (Citrus australasica o lima dedo, un cítrico australiano con pulpa con forma de glóbulos similares al caviar y sabor a lima ácida), menta, pimienta negra, vodka, jengibre, manzana, ámbar, kingwood (nota sintética basada en el producto Ambrocenide de la empresa Symrise, un aroma a ámbar amaderado) y granos de tonka.
La partida en los primeros minutos es ligera, con tonos suaves de un especiado cercano a pimienta rodeado de aires de licor y vetas secas de madera secundaria, con una capa tibia imprecisa y levemente a la crema que asciende gradualmente. En fase media a 15 minutos la capa cremosa asciende rápidamente hasta llegar a puntos frutales balanceados con especiados más notorios que dan impresiones muy cercanas a 1 Million de Paco Rabanne y The Secret de Antonio Banderas, ambos fabricados por la misma casa Puig que fabrica la línea Carolina Herrera, con aumentos de ámbar y madera de fondo a partir de 1 hora de aplicado y presencia en paralelo de pimienta más un picor no especiado extra que parece venir del licor y que da una sensación de volatilidad adicional al aroma que termina por ser absorbida por la pimienta a las 3 horas, con un cremoso más bajo e ideas esporádicas de granos de tonka que también tienden a reemplazarlo. A 6 horas el desarrollo de resinas con tonka supera a las maderas, con más apego a puntos especiados e idea de licor de manzana de The Secret con un cruce de inciensos que desaparece al poco rato, con sensación de aquilarias secundarias a 8 horas que aportan tibieza pero que no llegan a un punto destacado a nivel ambiental, y con el especiado rebajando la pimienta hacia especies más terrosas y amaderadas tipo cardamomo con nuez moscada y ascensos de la idea de licor por el lado de la tonka. En fase final resalta una resina suave con interferencia de tonka con residuos plásticos, madera y avainillados licorosos, con menos presencia de frutales y crema, y con el especiado más seco, menos picante e integrado en una idea de incienso tostado con polvo.
En estilo el perfume recuerda a otras fragancias de enfoque nocturno que incluso también son fabricados por la casa Puig como One Million y The Secret, reciclando un tono de crema con especies y licor tibio que al menos en un uso diario presenta características atemporales indiferentes de la época del año, con buena estela en verano y guardando un efecto tibio amaderado apegado a la piel en invierno con preferencia social no cotidiana ni para uso en solitario. En oficina la fragancia produce un efecto llamativo en el licor con crema, con momentos relajados en el especiado que lo dejan en un estilo semiformal sin corbata por la veta de madera, siendo perceptible a distancia de conversación sin volverse intrusivo ante los colegas y con una tibieza que incluso es empática, como una propuesta medianamente joven para exponer ideas en reuniones. En un uso nocturno la fragancia destaca al igual que sus pares One Million y The Secret, tal vez quedando sujeto a comparaciones y sensación de aroma conocido pero al menos dando un buen impacto al transpirar en pubs y fiestas con baile al superar el aroma los olores ambientales. Por el lado romántico el grupo tibio se vuelve a sentir empático y despierta curiosidad, con menos profundidad que One Million pero consiguiendo su cometido a distancia de conversación e invitando a acercarse, tal vez con la parte de pimienta dando momentos de menor receptividad que requieren de aplicaciones mesuradas en la piel. Rango de edad entre 20 y 45 años.
Desarrollado por Issey Miyake, D'Issey Pour
Homme es un perfume compuesto por una mezcla de notas aromáticas, amaderadas,
especiadas y envolventes, recomendado para uso durante el día. Sus notas son,
yusu, menufar azul, nues moscada, ambar, tabaco y sandalo de la india.
Un perfume masculino sofisticadoque contiene una
mezcla de dulce lima, semillas de malva. Envuelve con cedro atlas, cedro lebanon azul y madera gaiac. Añade un toque sexy y limpio, calido. Evoca la personalidad y el carisma. Perfecto para el día y la noche.
Esta fragancia la busqué en una multitienda para probarla por curiosidad para ver cómo había evolucionado con respecto al L'Eau D'Issey original, el cual no era uno de mis favoritos. Las notas son bastante parecidas, pero el balance es diferente, enfatizando más las especies que el lado cítrico y acuático.
La partida es diferente al original: aunque se siente fresco y acuático y con notas de partida de bergamotas o mandarinas y el mismo yuzú del original, agrega de inmediato notas de madera y especias que le quitan el tono de agua cítrica y le dan un toque clásico. Estas notas clásicas se mantienen en la fase media, donde desaparecen las notas cítricas, y siguen una línea similar a la madera de sándalo con especias del estilo de la canela, la nuez moscada y el cardamomo. Por momentos recuerda un poco al Christian Lacroix Noir hecho para Avon, que también es clásico pero no hecho con notas tradicionales (del estilo de la lavanda) y en este punto parecen compartir una nota de azafrán con madera aromática. En esta fase se siente algo curioso... Hacia la base las notas especiadas disminuyen en favor de otras en tono levemente inciensado ("incienso negro" ) y con persistencia de una nota acuática que es el sello del primer L'Eau D'Issey: las notas florales de las lilas acuáticas azules (o nenúfares).
La fragancia tiene muchas de las notas del primer L'Eau D'Issey (como el yuzú, los cítricos, los nenúfares, la canela, nuez moscada, cardamomo y azafrán) pero aumenta la intensidad y concentración de las notas especiadas por encima de los cítricos y acuáticos y cambia el vetiver por incienso. Mantiene un frescor apropiado para verano, como el original, pero las notas de especias amplían su uso hacia el invierno. Es intenso y con buena fijación, pero menos hiriente que el original, por lo que también abre una posibilidad de uso en oficina que resultaba chocante para el primer L'Eau D'Issey, conservando de éste el uso de diario y de noche (aunque ahora es algo más formal que su predecesor). En el aspecto romántico se siente masculino y no hiriente, por lo que es una mejora con respecto al original (aunque el L'Eau D'Issey tenía un nicho de mujeres a las que les atraía mucho su aroma y les resultaba sensual).
L’Eau d’Issey Pour Homme Sport de Issey Miyake es una propuesta aromática discreta, natural y deportiva. Un perfume para hombres de cualquier edad que buscan algo sencillo y urbano, pero al mismo tiempo también elegante y cosmopolita.
En su combinación aromática destacan unas notas intensas y refrescantes, inspiradas en la naturaleza. Un espíritu muy versátil y enérgico para los amantes del deporte. Un aroma ideal para comenzar bien el día, con una combinación muy vital y fresca.
El "Acqua di Gio" (pronunciado como "acua di yo" ya que "Gio" es el diminutivo con que los amigos cercanos se referían a Giorgio Armani) es una fragancia de aroma fácil de reconocer, de estilo cítrico frutal y con una muy buena fijación y capacidad de dejar estela ambiental. Lanzado al mercado a mediados de los años noventa, tuvo un momento de saturación hasta el año 2000... periodo en el cual era relativamente común y una de las fragancias preferidas para regalar ya que se sentía bien en casi cualquier piel y estilo. En la actualidad, con la aparición de nuevas fragancias Armani y la línea paralela Emporio, este perfume ha vuelto a un segmento de mercado más selectivo y menos masivo.
Las notas principales del perfume son: bergamota, nerolí, mandarina, jazmín, rosas, romero, caqui y pachulí.
En partida se sintió bastante fresca con un corte clásico algo tradicional hacia los cítricos acuáticos, con mezclas de naranjas, bergamotas, mandarinas aromáticas y algo de limón, bien mezclados sin que se sienta predominio exclusivo de alguno de los cítricos con respecto al resto. Este aroma cítrico se mantiene hasta la fase media, donde cede algo de terreno a nuevas notas verdes aromáticas en la línea del romero (e incluso con dejos breves de orégano), que le da un corte bastante mediterráneo... cítricos de la cabeza pero agregando nuevas notas frutales e incluso algo de flores también frescas y no densas. Este aroma ambiental es el que comúnmente se reconoce y asocia a esta fragancia, en tonos frescos frutales intensos y frescos. El tono frutal es algo más clásico, se sienten las mandarinas y limones pero también hay un tono frutal desconocido que se puede atribuir al caqui.
La fragancia es muy fresca, con tonos refrescantes diarios y de verano, pero también con un soporte clásico que le dan una buena presencia invernal no densa. Es limpio y elegante para usar en oficina, donde destaca por su intensidad y capacidad de dejar estela y aromatizar habitaciones pequeñas. En uso nocturno es elegante fresco, formal pero con un toque joven y relajado. Por el lado romántico se siente bastante masculino con influencias mediterráneas y tonos frutales algo gourmand.
En partida se sintió bastante fresca con un corte clásico algo tradicional hacia los cítricos acuáticos, con mezclas de naranjas, bergamotas, mandarinas aromáticas y algo de limón, bien mezclados sin que se sienta predominio exclusivo de alguno de los cítricos con respecto al resto. Este aroma cítrico se mantiene hasta la fase media, donde cede algo de terreno a nuevas notas verdes aromáticas en la línea del romero (e incluso con dejos breves de orégano), que le da un corte bastante mediterráneo... cítricos de la cabeza pero agregando nuevas notas frutales e incluso algo de flores también frescas y no densas. Este aroma ambiental es el que comúnmente se reconoce y asocia a esta fragancia, en tonos frescos frutales intensos y frescos. El tono frutal es algo más clásico, se sienten las mandarinas y limones pero también hay un tono frutal desconocido que se puede atribuir al caqui.
La fragancia es muy fresca, con tonos refrescantes diarios y de verano, pero también con un soporte clásico que le dan una buena presencia invernal no densa. Es limpio y elegante para usar en oficina, donde destaca por su intensidad y capacidad de dejar estela y aromatizar habitaciones pequeñas. En uso nocturno es elegante fresco, formal pero con un toque joven y relajado. Por el lado romántico se siente bastante masculino con influencias mediterráneas y tonos frutales algo gourmand.
Partida frutosa algo acuática o levemente cítrica (bergamota y mandarina mezcladas con limón y manzana) En notas medias mantiene el aroma de cabeza, pero agrega un dejo a ceniza, como vetiver o iris mezclado con algunas notas de té. Hay una pequeña nota de salvia amarga ácida con cardamomo también, y posiblemente una nota floral encubierta. Al final en la base siguen las notas frutosas presentes con musk y cedro y un dejo a vainilla apagada o granos de tonka.
Bastante joven, de diario y para oficina en estilo simple, más verano que invierno, pero funciona en ambas temporadas. La nota ahumada con la salvia le da una sensación nocturna de pub.
Bastante joven, de diario y para oficina en estilo simple, más verano que invierno, pero funciona en ambas temporadas. La nota ahumada con la salvia le da una sensación nocturna de pub.
El hombre de gustos clásicos optará por esta fragancia, pues está indicada para todo aquel que desee ser discreto y elegir un perfume para toda la vida sin llegar a ser anticuado. Armani pour homme es una fragancia que ataca con frescor con la utilización de la mandarina de sicilia y la bergamota, y se asienta sobre un cuerpo especiado de nuez moscada y clavo de olor.
Esta fragancia aparecida en el mercado durante el año 2010 corresponde a una nueva variante limitada de Le Male de 1995, para el cual se suelen preparan ediciones especiales en forma casi anual y en general para épocas veraniegas, distinguiéndose Le Male Terrible por proponer una imagen más agresiva basada en el término francés "enfant terrible" que se usa para designar a una persona de carácter irreverente o de comportamiento poco convencional, apodo que también se había ganado el diseñador Jean Paul Gaultier en el mundo de la moda por sus propuestas vanguardistas. El envase repite la misma botella con forma de torso masculino que se ha usado en cada edición especial desde el primer Le Male, agregando un colgante con la forma de una hoja de afeitar como símbolo de alguien con personalidad incisiva y que vive al filo de la navaja y con las bandas horizontales de la camiseta grabadas con líneas que dan la impresión de arañazos y surcos hechos con un cuchillo. En el sitio de Jean Paul Gaultier señalan las siguientes notas aromáticas: pomelo, pimienta rosada, lavanda, vetiver, musk y vainilla.
En la partida la fragancia muestra una tonalidad de anís breve que luego deriva a los 5 minutos en una impresión de menta que se afina en una lavanda fría con dejos marinos, subiendo este último grupo como parte dominante y dando tonos que traen recuerdos momentáneos del Le Male original por el lado de la lavanda, con partes de mentol y vetiver de lociones de afeitar clásicas hacia el fondo. En fase media a 45 minutos se mantiene el grupo de lavanda fría el cual sufre variaciones que pasan por enebro y líneas de tonos marinos a 1 hora y media de aplicado, con apariciones esporádicas de un anís terroso que termina solapando y rebajando al mínimo la parte de mentol con vetiver de aspecto antiguo, manteniendo un aspecto relativamente constante que varía hacia las 3 horas y media cuando aparece una porción de vainilla sucia ligeramente resinosa que vuelve a traer recuerdos de la primera edición de Le Male, mostrando a las 4 horas un aspecto plástico dentro de la vainilla y que da una idea entre cumarina suave, ámbar y flores de azahar, alcanzando a las 6 horas el aroma de Le Male en un formato polvoso y ligeramente cargado a unas violetas anisadas que recuerdan porciones de Lolita Lempicka au Masculin. A 12 horas el tono de vainilla característico de Le Male baja en favor de ascensos del tono de lavanda con resina y aires plásticos de la flor de azahar, con puntos picantes que se mueven entre anís y pimienta con un cuerpo con aires de enebro y menta cercanos a secos de vetiver tipo arbustos, con sensación de un aromático de bergamota con pomelo al fondo que tiene su origen en el anís. En fase final la fragancia mantiene las líneas plásticas de flor de azahar con resina tibia y vetas de anís con residuos de violetas con lavanda que determinan la porción dominante del perfume, en una tonalidad que se aleja de la idea inicial de Lolita Lempica au Masculin al agregar puntos de vainilla cargada a la cumarina que derivan de la resina y que parecen ser el único vínculo con el Le Male original.
La fragancia ofrece una nueva versión de Le Male que mantiene el centro reconocible de vainilla pero que cambia el entorno pasando por capas frías de corte marino que rematan en polvosos de comportamiento más cercano al estilo diario de primavera y verano pero que conservan el desplante invernal con un menor impacto, conservando la porción clásica del original y dándole un toque más sucio por el lado verde al anís, aguantando un uso semiformal e informal pero evitando situaciones dinámicas o deportivas al dar la idea que la densidad puede aumentar repentinamente al transpirar y terminar ahogando. En oficina el aroma balancea el estilo clásico del original con tonos más irreverentes y sucios por el lado verde, nuevamente atemporal como en el estilo de diario pero con un enfoque más individualista y agresivo, más competitivo a nivel de colegas y al momento de proponer ideas, pero también más intrusivo si se aplica en exceso y pudiendo sentirse más conflictivo al tratar de llegar a consensos de opiniones. Por el lado nocturno la fragancia alcanza su punto óptimo en la idea sucia, proyectando intrusividad y llamando la atención en círculos pequeños dando la idea que aprovecha conceptos de otros pares como Lolita Lempicka au Masculin y L'Eau d'Issey pour Homme, sintiéndose bien en pubs y fiestas de ambientes contaminados escapando de la idea de una imagen pulcra pero también evitando caer en el extremo adolescente descuidado, sintiéndose algo fuera de lugar en eventos más formales. En el campo romántico la proyección agresiva de la fragancia consigue atraer a distancia llegando hasta el nivel de conversación, pudiendo ser molesto a menor distancia, a mayor aplicación o con pareja conocida con quien existe más confianza.
En la partida la fragancia muestra una tonalidad de anís breve que luego deriva a los 5 minutos en una impresión de menta que se afina en una lavanda fría con dejos marinos, subiendo este último grupo como parte dominante y dando tonos que traen recuerdos momentáneos del Le Male original por el lado de la lavanda, con partes de mentol y vetiver de lociones de afeitar clásicas hacia el fondo. En fase media a 45 minutos se mantiene el grupo de lavanda fría el cual sufre variaciones que pasan por enebro y líneas de tonos marinos a 1 hora y media de aplicado, con apariciones esporádicas de un anís terroso que termina solapando y rebajando al mínimo la parte de mentol con vetiver de aspecto antiguo, manteniendo un aspecto relativamente constante que varía hacia las 3 horas y media cuando aparece una porción de vainilla sucia ligeramente resinosa que vuelve a traer recuerdos de la primera edición de Le Male, mostrando a las 4 horas un aspecto plástico dentro de la vainilla y que da una idea entre cumarina suave, ámbar y flores de azahar, alcanzando a las 6 horas el aroma de Le Male en un formato polvoso y ligeramente cargado a unas violetas anisadas que recuerdan porciones de Lolita Lempicka au Masculin. A 12 horas el tono de vainilla característico de Le Male baja en favor de ascensos del tono de lavanda con resina y aires plásticos de la flor de azahar, con puntos picantes que se mueven entre anís y pimienta con un cuerpo con aires de enebro y menta cercanos a secos de vetiver tipo arbustos, con sensación de un aromático de bergamota con pomelo al fondo que tiene su origen en el anís. En fase final la fragancia mantiene las líneas plásticas de flor de azahar con resina tibia y vetas de anís con residuos de violetas con lavanda que determinan la porción dominante del perfume, en una tonalidad que se aleja de la idea inicial de Lolita Lempica au Masculin al agregar puntos de vainilla cargada a la cumarina que derivan de la resina y que parecen ser el único vínculo con el Le Male original.
La fragancia ofrece una nueva versión de Le Male que mantiene el centro reconocible de vainilla pero que cambia el entorno pasando por capas frías de corte marino que rematan en polvosos de comportamiento más cercano al estilo diario de primavera y verano pero que conservan el desplante invernal con un menor impacto, conservando la porción clásica del original y dándole un toque más sucio por el lado verde al anís, aguantando un uso semiformal e informal pero evitando situaciones dinámicas o deportivas al dar la idea que la densidad puede aumentar repentinamente al transpirar y terminar ahogando. En oficina el aroma balancea el estilo clásico del original con tonos más irreverentes y sucios por el lado verde, nuevamente atemporal como en el estilo de diario pero con un enfoque más individualista y agresivo, más competitivo a nivel de colegas y al momento de proponer ideas, pero también más intrusivo si se aplica en exceso y pudiendo sentirse más conflictivo al tratar de llegar a consensos de opiniones. Por el lado nocturno la fragancia alcanza su punto óptimo en la idea sucia, proyectando intrusividad y llamando la atención en círculos pequeños dando la idea que aprovecha conceptos de otros pares como Lolita Lempicka au Masculin y L'Eau d'Issey pour Homme, sintiéndose bien en pubs y fiestas de ambientes contaminados escapando de la idea de una imagen pulcra pero también evitando caer en el extremo adolescente descuidado, sintiéndose algo fuera de lugar en eventos más formales. En el campo romántico la proyección agresiva de la fragancia consigue atraer a distancia llegando hasta el nivel de conversación, pudiendo ser molesto a menor distancia, a mayor aplicación o con pareja conocida con quien existe más confianza.
La fragancia es bastante buena y diferente, en ese aspecto me sorprendió. Tiene una partida frutal algo cítrica de pomelo y bergamota, con un dejo tradicional de lavanda y menta fresca. La nota media aparece gradualmente fundida con la de cabeza, levemente especiada con canela y nuez moscada sin volverse una fragancia densa, oriental o de invierno por estas notas. Percibiendo las notas de base, algo maderosas y con dulce de ámbar, con una tendencia a lo tradicional de la lavanda que todavía se sentía pero aún fresca por las notas frutales de la cabeza que también persistían (como acotación, las notas aromáticas fueron escogidas pensando en un paseo por los Estados Unidos, con frutos y maderas de árboles representativos de cada estado.
El aroma es reconocible, distintivo pero no intenso. Sirve tanto para verano con invierno, por las notas de lavanda y especias y porque las frutas no son una ducha cítrica fresca refrescante de verano. Para uso diario y oficina por la lavanda que da un toque clásico, funciona también de noche pero para eventos simples... es algo casual para usar en una fiesta de matrimonio.
Esta fragancia masculina del año 2008 resalta la idea de un hombre seductor, mezcla entre elegante y rebelde, valorado en un precio de 1 millón y con una aroma de oro puro... un metal recurrente dentro del diseño de vestuario de Paco Rabbane. El frasco toma la forma de un lingote de oro como el visto en las películas del Viejo Oeste, incluso con el nombre del perfume grabado con letras en estilo de ésa época. Las notas declaradas en el sitio web del perfume destacan: menta pimentada, mandarina, canela, extracto de rosas, cardamomo, ámbar ketal (como sustituto del ambargris, una nota favorita de Paco Rabanne usada como fijador en perfumes) y aroma sintético de cuero obtenido del aceite de abedul.
En partida la fragancia tiene tonos frutales algo especiados pero imprecisos... los frutales oscilan entre un rojo y un cítrico aromático con una nota herbal mezclada. En notas medias el aroma toma más definición y se vuelve más vivo y notorio, sintiéndose mas los cítricos de la cabeza en tono fresco y con una naranja aromática que recuerda mucho a la naranja roja del Amor Amor de mujer. Los verdes tienden a un aroma mediterráneo pero hacia el fondo, con algo de albahaca, pero se siente una nota al agua que parece un floral, como una rosa acuática. Se siente canela mezclada con dulce, posiblemente una resina, ámbar o pachulí (en un estilo que recuerda otra fragancia) y que se mantiene por un buen tiempo en esta línea, con la aparición de un amaderado también dulce que parece ser el extracto de abedul usado como sucedáneo del cuero y dejos secos terrosos de cardamomo. En notas de base tiende a un especiado maderoso dulce relativamente fresco pero intenso, con canela licorosa, ámbar denso que tiende a una resina de aroma volátil, pachulí y dejos florales al agua. La nota sintética de cuero no toma el estilo denso característico de los años 80, estando más cerca del aroma de maderas e incluso de cenizas.
La fragancia toma características en un comienzo frutales y luego más ambaradas con tonos especiados no picantes que mantienen la línea fresca del comienzo, con características atemporales pero con preferencia a espacios cerrados y un poco mas fríos... no es una fragancia para andar a pleno sol en una playa, pero si da la idea de alguien en el mismo escenario pero dentro de un automóvil. Aunque no son del mismo estilo olfativo, repite una tendencia nocturna joven con Ultrared también de Paco Rabanne pero más seria, algo más formal y sin las notas gourmand. La misma idea de formal joven calza bien en oficina, en especial por el final ambarado denso que es el que da el toque elegante. Puede funcionar de diario, ya que las primeras notas son más frescas y frutales matinales y con el paso de las horas el tono más nocturno figura más durante la tarde. En el aspecto romántico no cae mal, pero el atractivo que tiene es más serio y nocturno que sensual.
En partida la fragancia tiene tonos frutales algo especiados pero imprecisos... los frutales oscilan entre un rojo y un cítrico aromático con una nota herbal mezclada. En notas medias el aroma toma más definición y se vuelve más vivo y notorio, sintiéndose mas los cítricos de la cabeza en tono fresco y con una naranja aromática que recuerda mucho a la naranja roja del Amor Amor de mujer. Los verdes tienden a un aroma mediterráneo pero hacia el fondo, con algo de albahaca, pero se siente una nota al agua que parece un floral, como una rosa acuática. Se siente canela mezclada con dulce, posiblemente una resina, ámbar o pachulí (en un estilo que recuerda otra fragancia) y que se mantiene por un buen tiempo en esta línea, con la aparición de un amaderado también dulce que parece ser el extracto de abedul usado como sucedáneo del cuero y dejos secos terrosos de cardamomo. En notas de base tiende a un especiado maderoso dulce relativamente fresco pero intenso, con canela licorosa, ámbar denso que tiende a una resina de aroma volátil, pachulí y dejos florales al agua. La nota sintética de cuero no toma el estilo denso característico de los años 80, estando más cerca del aroma de maderas e incluso de cenizas.
La fragancia toma características en un comienzo frutales y luego más ambaradas con tonos especiados no picantes que mantienen la línea fresca del comienzo, con características atemporales pero con preferencia a espacios cerrados y un poco mas fríos... no es una fragancia para andar a pleno sol en una playa, pero si da la idea de alguien en el mismo escenario pero dentro de un automóvil. Aunque no son del mismo estilo olfativo, repite una tendencia nocturna joven con Ultrared también de Paco Rabanne pero más seria, algo más formal y sin las notas gourmand. La misma idea de formal joven calza bien en oficina, en especial por el final ambarado denso que es el que da el toque elegante. Puede funcionar de diario, ya que las primeras notas son más frescas y frutales matinales y con el paso de las horas el tono más nocturno figura más durante la tarde. En el aspecto romántico no cae mal, pero el atractivo que tiene es más serio y nocturno que sensual.
A diferencia del One Millon de Paco Rabanne, esta fragancia ofrece aromas mas asentuados, ya que es una versión de Eau de Parfum donde los aromas y las escencias se profundizan, asentuan y son mucho mas perdurables. Posee un cod que lo hace absolutamente único.
Esta fragancia es la parte masculina de las ediciones que hace Kenzo sobre sus fragancia más emblemática que es "L'Eau par Kenzo" inspirada en el color índigo y con una faceta más especiada que otras ediciones anteriores. La caja sigue la tradición de otros empaques de la marca al mostrar un paisaje, en este caso el brillo de un horizonte marino en tonos cercanos al del color índigo y repitiendo la misma botella ondulada que encaja con las curvas de la botella femenina. Kenzo señala las siguientes notas aromáticas principales: jengibre, limón, cilantro, resina de elemi, vetiver, cedro, resina de ládano y granos de tonka.
La partida de la fragancia se siente diferente al resto de las ediciones anteriores de L'Eau para hombre, destacando ahora un tono más especiado ligeramente al anís con algo de alimonado y verdes dulces. En fase media la fragancia retoma la senda de los anteriores L'Eau masculinos al resaltar aun más la veta alimonada con verdes al agua, más un cruce de jengibre terroso que se integra bien con el limón y nuevas notas de ámbar fresco que también van a la par con los cítricos y el tono de agua. Se sienten otros especiados tenues parecidos a los existentes en Declaration de Cartier, incluso con un dejo de una naranja o mandarina amarga que parece ser aportado por el jengibre, repitiendo la idea de cristales del sílica gel usado como secante en los tapones de las tabletas efervescentes de vitamina C de naranja. El ámbar tiende a destacar más por ocasiones acompañado de una nota de cedro, ambos moviéndose en conjunto. A unas 5 horas de aplicado tiende a quedarse en una mezcla de partes iguales de bergamotas aromáticas con verdes frescos, jengibre maderoso y raíces tipo vetiver. En fase final el jengibre sigue como nota dominante mezclado con trazas verdes que son las que tienen un tinte alimonado, sumado a una nota tibia como musk y con un dejo a raíces frescas. Al oler por más tiempo se aprecia que el musk son notas de resina no quemada con tintes vegetales, sumado a un especiado impreciso suave y también cercano al verde.
El aroma se siente como una reinvención del aroma clásico del L'Eau par Kenzo dejando atrás los verdes alimonados con salvia que lo caracterizaban como un agua de verano, agregando una mayor proporción de especies que todavía se sienten frescas pero que dan la idea de un perfume que brilla después de la puesta del sol. Tiene un estilo de diario fresco, principalmente primaveral y veraniego pero aguantando bien una época invernal no fría en interiores. Destaca bastante en oficina por el jengibre que da la nota elegante sin caer en lo denso ni lo extremadamente formal, inclinado al semiformal de camisa abierta e incluso de camisa arremangada de comportamiento más dinámico. Como aroma nocturno tiene buena proyección en ambientes limpios, de salas pequeñas como reuniones en casas o cenas al aire libre, perdiéndose en una fiesta. Por el lado romántico la nota especiada tiene un buen desempeño, en parte con una cercanía a los tonos comestibles y degustables (sin llegar a un gourmand) que causan curiosidad y atracción y por una buena imagen masculina.
La partida de la fragancia se siente diferente al resto de las ediciones anteriores de L'Eau para hombre, destacando ahora un tono más especiado ligeramente al anís con algo de alimonado y verdes dulces. En fase media la fragancia retoma la senda de los anteriores L'Eau masculinos al resaltar aun más la veta alimonada con verdes al agua, más un cruce de jengibre terroso que se integra bien con el limón y nuevas notas de ámbar fresco que también van a la par con los cítricos y el tono de agua. Se sienten otros especiados tenues parecidos a los existentes en Declaration de Cartier, incluso con un dejo de una naranja o mandarina amarga que parece ser aportado por el jengibre, repitiendo la idea de cristales del sílica gel usado como secante en los tapones de las tabletas efervescentes de vitamina C de naranja. El ámbar tiende a destacar más por ocasiones acompañado de una nota de cedro, ambos moviéndose en conjunto. A unas 5 horas de aplicado tiende a quedarse en una mezcla de partes iguales de bergamotas aromáticas con verdes frescos, jengibre maderoso y raíces tipo vetiver. En fase final el jengibre sigue como nota dominante mezclado con trazas verdes que son las que tienen un tinte alimonado, sumado a una nota tibia como musk y con un dejo a raíces frescas. Al oler por más tiempo se aprecia que el musk son notas de resina no quemada con tintes vegetales, sumado a un especiado impreciso suave y también cercano al verde.
El aroma se siente como una reinvención del aroma clásico del L'Eau par Kenzo dejando atrás los verdes alimonados con salvia que lo caracterizaban como un agua de verano, agregando una mayor proporción de especies que todavía se sienten frescas pero que dan la idea de un perfume que brilla después de la puesta del sol. Tiene un estilo de diario fresco, principalmente primaveral y veraniego pero aguantando bien una época invernal no fría en interiores. Destaca bastante en oficina por el jengibre que da la nota elegante sin caer en lo denso ni lo extremadamente formal, inclinado al semiformal de camisa abierta e incluso de camisa arremangada de comportamiento más dinámico. Como aroma nocturno tiene buena proyección en ambientes limpios, de salas pequeñas como reuniones en casas o cenas al aire libre, perdiéndose en una fiesta. Por el lado romántico la nota especiada tiene un buen desempeño, en parte con una cercanía a los tonos comestibles y degustables (sin llegar a un gourmand) que causan curiosidad y atracción y por una buena imagen masculina.
Este perfume usa un enfoque relativamente minimalista en torno a una nota de anís, con el fin de representar el aroma del aire puro, casi de altura y sin la presencia de elementos terrestres. El frasco da la idea de una ventana hacia el horizonte o de un bloque de aire rectangular, de bordes irregulares y con nubes incluida que fue recortado del cielo.
En partida se siente una mezcla ente anís tipo medicamento con notas de menta fresca, con una sensación de aroma conocido o similitud con otro perfume. El anís evoluciona y toma más cuerpo, más en la línea de los aromáticos acercándose a la idea de semillas machacadas cuando llega a la fase media, donde toma más presencia y parece mezclarse con algún tipo de naranja fresca porque da una sensación muy parecida al Must pour Homme de Cartier, aunque más especiado y sin maderas. Parece existir una segunda nota de la familia del anís y de las maderas, que le da un tono algo sintético a la fragancia por momentos (es posible que sea regaliz, por el tono sintético tipo medicamento en jarabe). En las notas de base sigue dominando el anís con un estilo sintético y una intensidad bastante alta, con una nota maderosa suave y dulce en segundo plano.
La fragancia tiene un aroma, intensidad y estilo fácil de distinguir, como una versión más joven e informal del Must pour Homme. Se siente fresco, no exactamente como un cubo de aire puro pero sí como una fragancia de exteriores (pero no en estilo de aroma de la naturaleza). Aunque es de aroma intenso no se siente denso para un uso de diario, dando el anís un punto medio entre frescura veraniega y especiado invernal. En oficina el anís se siente limpio y la mezcla es lo bastante original para destacar del promedio. Tiene potencia nocturna para salidas informales en pubs con aire enrarecido con humo y comida, diferenciándose de estos aromas y marcando presencia. Puede que sirva para un uso más formal, pero el tono algo sintético beneficia a alguien joven. En el lado romántico el anís con regaliz bordea lo gourmand, aunque pueden darse casos de aroma chocante o muy metálico al aplicar en exceso.
En partida se siente una mezcla ente anís tipo medicamento con notas de menta fresca, con una sensación de aroma conocido o similitud con otro perfume. El anís evoluciona y toma más cuerpo, más en la línea de los aromáticos acercándose a la idea de semillas machacadas cuando llega a la fase media, donde toma más presencia y parece mezclarse con algún tipo de naranja fresca porque da una sensación muy parecida al Must pour Homme de Cartier, aunque más especiado y sin maderas. Parece existir una segunda nota de la familia del anís y de las maderas, que le da un tono algo sintético a la fragancia por momentos (es posible que sea regaliz, por el tono sintético tipo medicamento en jarabe). En las notas de base sigue dominando el anís con un estilo sintético y una intensidad bastante alta, con una nota maderosa suave y dulce en segundo plano.
La fragancia tiene un aroma, intensidad y estilo fácil de distinguir, como una versión más joven e informal del Must pour Homme. Se siente fresco, no exactamente como un cubo de aire puro pero sí como una fragancia de exteriores (pero no en estilo de aroma de la naturaleza). Aunque es de aroma intenso no se siente denso para un uso de diario, dando el anís un punto medio entre frescura veraniega y especiado invernal. En oficina el anís se siente limpio y la mezcla es lo bastante original para destacar del promedio. Tiene potencia nocturna para salidas informales en pubs con aire enrarecido con humo y comida, diferenciándose de estos aromas y marcando presencia. Puede que sirva para un uso más formal, pero el tono algo sintético beneficia a alguien joven. En el lado romántico el anís con regaliz bordea lo gourmand, aunque pueden darse casos de aroma chocante o muy metálico al aplicar en exceso.
Esta fragancia del año 2012 corresponde a una nueva versión de la serie Kenzo Homme de 1991 y que se suma a la edición Boisée del 2010, tomando en esta ocasión un enfoque fresco y deportivo similar a los lanzamientos de otras marcas, tomando como inspiración a un hombre como un atleta innato de espíritu libre que sabe tomar sus desafíos de manera relajada sin tomarse nada en forma seria y cuyo campo de juego es la naturaleza. La botella mantiene la inspiración en el bambú establecida por Kenzo Homme, pero usando en forma particular el frasco de Kenzo Homme Edition Eau de Toilette Boisée por las muescas al frente que representan una rama con hojas, con un vidrio en tono gris y con la palabra "Sport" en rojo como color representativo de la energía de la fragancia. Kenzo señala que las notas aromáticas principales son: pomelo, menta, limón, jengibre, geranio, cedro y vetiver.
En la partida la fragancia presenta líneas tenues de cítricos apagados y discretos con un fondo terroso parte madera y parte especiada que muestra cercanía con un jengibre a los 10 minutos y que agrega capas de flores apagadas poco precisas. En fase media a 40 minutos el aroma cobra más fuerza, resaltando la línea de jengibre que causa picor en el fondo de la garganta y con la veta cítrica dando una capa fragante de sustento, desarrollando un floral apagado que apunta hacia jazmín con geranio y que agrega herbales tenues a 1 hora de la partida, frenando su desarrollo hasta las 2 horas cuando los herbales se afinan en menta suave no mentolada con rasgos de albahaca, sumando una capa plástica que en principio parece flor de azahar pero que también da la posibilidad de un tipo de inciensado fresco no oriental. A las 4 horas la fragancia comienza a desarrollar una capa especiada más intensa y con mayor presencia de picor, con desarrollo de maderas de bosque con verdes cercanas a pachulí que parecen evolucionar de las hojas de menta y mostrando líneas tipo salvia ligadas a cáscara de pomelo verde, bajando la carga floral a vestigios de plástico de flor de azahar, con el pachulí acercándose a vetiver fresco y amaderado a las 5 horas. A las 8 horas el aroma da una aproximación breve hacia Individuel de Montblanc por un desarrollo más marcado de la nota de geranio que incluso arrastra algo de canela, virando a las 10 horas hacia nuevas variantes de vetiver con menta que parecen una amplificación de Guerlain Pour Homme, con alimonados rústicos derivados de cáscara de pomelo más amargo que dan tintes de pimienta y salvia áspera al agua con flores limpias que también traen recuerdos de simplificaciones de The Beat de Burberry con Brut clásico, cruzando una veta de ajenjo anisado a las 14 horas. En fase final a 24 horas la fragancia se estabiliza en un vetiver fresco y profundo de rasgos alimonados y fondos especiados suaves hacia el terroso con pimienta, con un punto dulce cercano a ámbar diluido o madera resinosa y dejos de menta alrededor que tienden a un pachulí frío de bosque.
La fragancia desde su partida se acerca a un concepto de sport desarrollando un aroma de intensidad mesurada y transpirable que con el paso de las horas se estabiliza en una fragancia de mayor intensidad y de corte urbano con más presencia de especies y madera, con un enfoque apegado al escenario de diario y que aguanta un uso deportivo mediano y atemporal de interiores, que madura con el paso del tiempo y se mueve en un rango cercano al semiformal. En oficina la fragancia maneja líneas cotidianas, con un efecto memoria ligeramente superior al promedio en la veta de madera con vetiver que se distingue pasada la fase media y apegada a un enfoque que privilegia un aspecto más bien serio que alegre, con preferencia hacia vestimentas que no consideren corbata y centrado en relaciones entre colegas más que con propósitos profesionales tipo reuniones o tratos con clientes. En el campo nocturno el aroma maneja líneas sucias de pub, con cierto parentesco con el vetiver de L'Eau d'Issey pour Homme de Miyake pero con un rango aromático menor y orientado a círculos íntimos, moviéndose bien en fiestas, reuniones con amigos y cenas relajadas, perdiendo impacto en eventos con más producción. En lo romántico el perfume presenta líneas ásperas de poco impacto sensual que por momentos se van a verdes maduros, manteniendo la impresión de un perfume que privilegia un disfrute personal más que social.
En la partida la fragancia presenta líneas tenues de cítricos apagados y discretos con un fondo terroso parte madera y parte especiada que muestra cercanía con un jengibre a los 10 minutos y que agrega capas de flores apagadas poco precisas. En fase media a 40 minutos el aroma cobra más fuerza, resaltando la línea de jengibre que causa picor en el fondo de la garganta y con la veta cítrica dando una capa fragante de sustento, desarrollando un floral apagado que apunta hacia jazmín con geranio y que agrega herbales tenues a 1 hora de la partida, frenando su desarrollo hasta las 2 horas cuando los herbales se afinan en menta suave no mentolada con rasgos de albahaca, sumando una capa plástica que en principio parece flor de azahar pero que también da la posibilidad de un tipo de inciensado fresco no oriental. A las 4 horas la fragancia comienza a desarrollar una capa especiada más intensa y con mayor presencia de picor, con desarrollo de maderas de bosque con verdes cercanas a pachulí que parecen evolucionar de las hojas de menta y mostrando líneas tipo salvia ligadas a cáscara de pomelo verde, bajando la carga floral a vestigios de plástico de flor de azahar, con el pachulí acercándose a vetiver fresco y amaderado a las 5 horas. A las 8 horas el aroma da una aproximación breve hacia Individuel de Montblanc por un desarrollo más marcado de la nota de geranio que incluso arrastra algo de canela, virando a las 10 horas hacia nuevas variantes de vetiver con menta que parecen una amplificación de Guerlain Pour Homme, con alimonados rústicos derivados de cáscara de pomelo más amargo que dan tintes de pimienta y salvia áspera al agua con flores limpias que también traen recuerdos de simplificaciones de The Beat de Burberry con Brut clásico, cruzando una veta de ajenjo anisado a las 14 horas. En fase final a 24 horas la fragancia se estabiliza en un vetiver fresco y profundo de rasgos alimonados y fondos especiados suaves hacia el terroso con pimienta, con un punto dulce cercano a ámbar diluido o madera resinosa y dejos de menta alrededor que tienden a un pachulí frío de bosque.
La fragancia desde su partida se acerca a un concepto de sport desarrollando un aroma de intensidad mesurada y transpirable que con el paso de las horas se estabiliza en una fragancia de mayor intensidad y de corte urbano con más presencia de especies y madera, con un enfoque apegado al escenario de diario y que aguanta un uso deportivo mediano y atemporal de interiores, que madura con el paso del tiempo y se mueve en un rango cercano al semiformal. En oficina la fragancia maneja líneas cotidianas, con un efecto memoria ligeramente superior al promedio en la veta de madera con vetiver que se distingue pasada la fase media y apegada a un enfoque que privilegia un aspecto más bien serio que alegre, con preferencia hacia vestimentas que no consideren corbata y centrado en relaciones entre colegas más que con propósitos profesionales tipo reuniones o tratos con clientes. En el campo nocturno el aroma maneja líneas sucias de pub, con cierto parentesco con el vetiver de L'Eau d'Issey pour Homme de Miyake pero con un rango aromático menor y orientado a círculos íntimos, moviéndose bien en fiestas, reuniones con amigos y cenas relajadas, perdiendo impacto en eventos con más producción. En lo romántico el perfume presenta líneas ásperas de poco impacto sensual que por momentos se van a verdes maduros, manteniendo la impresión de un perfume que privilegia un disfrute personal más que social.
Las fragancias Givenchy casi siempre funcionan bien y no están del todo masificadas (excepto por el pobre Xeryus Rouge que lo pasan tirando al aire en las multitiendas para que la gente lo huela). Esta fragancia tiene un aroma distintivo suave pero no común, como para que a uno lo huelan sin que la otra persona adivine que perfume está usando.
Bastante agradable, las notas de cabeza son cítricas suaves basadas en pomelo, más ciertas notas de menta, que deben ser algo breves porque me dijeron que las tenía pero no las sentí. Lo mejor es la nota media, la moka, bastante en estilo gourmand y que por lo menos cuando la probé se me sentía más como chocolate que como café. En la nota base la sensación de gourmand sigue, con madera de avellano y otras maderas aromáticas suaves.
La sensación general del perfume al usarlo es de relajación, como un aroma para sentir uno mismo. Apropiado para oficina al no ser intrusivo, también de diario y podría aceptar un uso nocturno simple aprovechando la moka. En invierno las notas de mokas deberían ser entibiantes y más dulces, mientras que en verano deberían aprovecharse las notas frescas del pomelo y la menta.
Bastante agradable, las notas de cabeza son cítricas suaves basadas en pomelo, más ciertas notas de menta, que deben ser algo breves porque me dijeron que las tenía pero no las sentí. Lo mejor es la nota media, la moka, bastante en estilo gourmand y que por lo menos cuando la probé se me sentía más como chocolate que como café. En la nota base la sensación de gourmand sigue, con madera de avellano y otras maderas aromáticas suaves.
La sensación general del perfume al usarlo es de relajación, como un aroma para sentir uno mismo. Apropiado para oficina al no ser intrusivo, también de diario y podría aceptar un uso nocturno simple aprovechando la moka. En invierno las notas de mokas deberían ser entibiantes y más dulces, mientras que en verano deberían aprovecharse las notas frescas del pomelo y la menta.
Esta fragancia del año 1994 corresponde a una nueva versión de Insensé, una fragancia ahora descontinuada lanzada un año antes y que llamó la atención por una publicidad orientada a destacar su carácter insolente y algo desfachatado (incluso el nombre "Insensé" en francés no se refiere a incienso, si no a un concepto de "sin sus sentidos" e incluso "sin conciencia"). Esta edición destaca por usar el mismo frasco del original pero usando un empaque con los colores invertidos (caja azul con letras amarillas, contra la caja amarilla de Insensé) y reforzando la idea de azul con una insinuación del mar, no exactamente por un enfoque con olor marítimo si no como símbolo de un espíritu libre y todavía joven. En el frasco del tester que probé destacaban las siguientes notas principales: frutos al agua, gálbano, cardamomo, clavo de olor, salvia, cedro y tabaco.
La partida es levemente frutal, de frutos neutros tipo grosellas no rojas y un dejo suave entre cuero y resinas. A unos 30 minutos de aplicado la fase media presenta una modificación con respecto a la partida, tomando casi los mismo aromas del comienzo pero reorganizándolos en lo que parecen las notas de cata de un vino tinto tipo Merlot, con uvas, frutos oscuros tipo mora o grosellas, cuero, especies y taninos. Con el tiempo las notas de fruta bajan resaltando una resina bastante ligera tipo cuero natural, no del cuero tipo curtido ni del tipo gamuza aromática y bastante lejos de la idea de otras resinas intensas como el incienso, con trazas de cardamomo molido. Al cabo de varias horas vuelven las frutas pero bastante mezcladas con resina para dar un aroma entre aromático y especiado seco con un repunte de sensación de agua y de aire marino, algo que no se sentía claramente en la partida. Se siente algo de madera aromática, pero quedando bajo la influencia de la resina. La fase final mantiene algunas frutas con resina suave, pero agrega una sensación secundaria de hierba tipo salvia con dejos amargos y algo de cuero con especies más cercanas al clavo de olor que a la pimienta. La madera es mínima y parece una evolución de la nota de nuez moscada.
El perfume es un cruce entre frutales oscuros y resina que por momentos da sensaciones licorosas tipo vino, no exactamente un aroma marino excepto por un pequeño punto en fase media, una especie de mezcla entre el estilo clásico de Givenchy del primer Xeryus con la tendencia aromática fresca de los noventa. En estilo se siente atemporal, sin llegar a una idea calurosa de playa por los tonos de resina al cuero pero sí como un aroma de ciudad independiente de la estación de año. Es cómodo de usar y no complejo para un uso de diario y relajado para un uso de oficina, con cierto dejo clásico de los noventa que lo empuja al campo de lo semiformal más que de lo informal. Las frutas que rondan en el aroma le dan un enfoque relajado más de día que de noche, perdiéndose como aroma nocturno... algo parecido pasa en el campo romántico donde la mezcla parece apegarse a un estilo personal más que uno de proyección sensual.
La partida es levemente frutal, de frutos neutros tipo grosellas no rojas y un dejo suave entre cuero y resinas. A unos 30 minutos de aplicado la fase media presenta una modificación con respecto a la partida, tomando casi los mismo aromas del comienzo pero reorganizándolos en lo que parecen las notas de cata de un vino tinto tipo Merlot, con uvas, frutos oscuros tipo mora o grosellas, cuero, especies y taninos. Con el tiempo las notas de fruta bajan resaltando una resina bastante ligera tipo cuero natural, no del cuero tipo curtido ni del tipo gamuza aromática y bastante lejos de la idea de otras resinas intensas como el incienso, con trazas de cardamomo molido. Al cabo de varias horas vuelven las frutas pero bastante mezcladas con resina para dar un aroma entre aromático y especiado seco con un repunte de sensación de agua y de aire marino, algo que no se sentía claramente en la partida. Se siente algo de madera aromática, pero quedando bajo la influencia de la resina. La fase final mantiene algunas frutas con resina suave, pero agrega una sensación secundaria de hierba tipo salvia con dejos amargos y algo de cuero con especies más cercanas al clavo de olor que a la pimienta. La madera es mínima y parece una evolución de la nota de nuez moscada.
El perfume es un cruce entre frutales oscuros y resina que por momentos da sensaciones licorosas tipo vino, no exactamente un aroma marino excepto por un pequeño punto en fase media, una especie de mezcla entre el estilo clásico de Givenchy del primer Xeryus con la tendencia aromática fresca de los noventa. En estilo se siente atemporal, sin llegar a una idea calurosa de playa por los tonos de resina al cuero pero sí como un aroma de ciudad independiente de la estación de año. Es cómodo de usar y no complejo para un uso de diario y relajado para un uso de oficina, con cierto dejo clásico de los noventa que lo empuja al campo de lo semiformal más que de lo informal. Las frutas que rondan en el aroma le dan un enfoque relajado más de día que de noche, perdiéndose como aroma nocturno... algo parecido pasa en el campo romántico donde la mezcla parece apegarse a un estilo personal más que uno de proyección sensual.
Comparado con el Givenchy pour Homme tradicional, el de envase rojo, esta versión se supone que es más relajada y menos formal que su antecesor, dejando de lado las notas más elegantes y pasando a algo más casual e informal. El hecho de ser más informal juega en contra, pues no es tan reconocible como la versión original... se da el caso inverso de la serie Xeryus, donde de un Xeryus tradicional se pasó a un Xeryus Rouge más sensual y reconocible. Acá de una fragancia de aroma único y de gusto de mujeres se pasa a algo más genérico.
En la nota de cabeza, si bien la partida también es cítrica y sigue teniendo bergamota con pomelo, son menos intensas las notas naranjosas del original. La nota media se siente rápido, en unos 2 minutos, con un dejo algo picante a pimienta, cardamomo o especias suaves. Una sensación frutosa maderosa se repite con las notas de davana, pero aparece un dejo marino en forma esporádica. La base es vetiver con cedro, pero agrega resinas de olíbano. A las 24 horas el papel de prueba tiene olor a resina oriental (no vainillosa, más hacia el incienso ácido) y algunas notas de madera.
Supuestamente es casual, pero oscila entre lo tradicional y lo oceánico genérico, sin notas llamativas que lo hagan reconocible. Para uso en verano en invierno, no privilegia una temporada en particular, para uso diario y en oficina, le falta algo de personalidad para uso nocturno y romántico.
En la nota de cabeza, si bien la partida también es cítrica y sigue teniendo bergamota con pomelo, son menos intensas las notas naranjosas del original. La nota media se siente rápido, en unos 2 minutos, con un dejo algo picante a pimienta, cardamomo o especias suaves. Una sensación frutosa maderosa se repite con las notas de davana, pero aparece un dejo marino en forma esporádica. La base es vetiver con cedro, pero agrega resinas de olíbano. A las 24 horas el papel de prueba tiene olor a resina oriental (no vainillosa, más hacia el incienso ácido) y algunas notas de madera.
Supuestamente es casual, pero oscila entre lo tradicional y lo oceánico genérico, sin notas llamativas que lo hagan reconocible. Para uso en verano en invierno, no privilegia una temporada en particular, para uso diario y en oficina, le falta algo de personalidad para uso nocturno y romántico.
Esta fragancia, cuyo nombre real según el sitio de Givenchy es "RWD PLAY FFWD", aparece anunciada en varios sitios como una creación del año 2008 pero en muchos países de habla hispana comenzó su comercialización sólo a mediados del 2009 y en conjunto con una versión más intensa. Su nombre viene del botón "Play" de reproducción de un reproductor portátil tipo MP3, que suele estar acompañado de las teclas de retroceso y avance rápido "Rwd" y "FFwd". La forma de la botella tiene líneas compactas que se inspiran en un reproductor de MP3 llevando impreso en el frente los nombres de las teclas y sus flechas simbólicas. El sitio de Givenchy declara las siguientes notas aromáticas: bergamota, mandarina, naranja amarga, pomelo, madera de amyris ("amyris balsamifera" un árbol pequeño centroamericano con un aroma descrito entre sándalo, guaiac y resina dulce con pimienta), pimienta negra, flor de café, vetiver y pachulí.
En partida el aroma recuerda algunos tonos de naranja aromática con mezclas de la misma familia tipo mandarina y bergamota, en tonos no extremadamente cítricos acompañado de un aroma de madera levemente seco. En fase media el aroma no presenta grandes cambios, manteniendo los tonos de naranja y el aroma a madera seca, aunque variando el balance de notas y privilegiando a la madera por encima de las naranjas, que a esta altura también se siente seca como cáscara aromática. Se sienten pequeños tonos dulces frutales, con un dejo a vainilla y trazas especiadas. Da la idea de un tono de café fresco, no tostado, lo cual sería extraño ya que al aroma del café clásico proviene del tostado, no de la flor. Por momentos la naranja y sus similares tienden a repuntar, mostrando más riqueza a nivel de bergamotas y tonos más dulces frutales, aunque sin una gran estela. El tono dulce ya no parece vainilla, si no una mezcla entre los dulce frutales de bergamota y un dejo levemente acaramelado de pachulí, que da nuevamente un tono seco entre madera y papel con raíces. La madera alcanza un nivel suave, parecido al cedro con tabaco y con trazas dulces y puntos especiados con algunos rasgos de ámbar. A unas 6 horas de aplicado repunta nuevamente la bergamota con una inclinación a mandarina, dando unas vetas que recuerdan algo de Allure Homme Sport de Chanel. La fase final tiene bastante madera tibia y casi nada de mandarinas, con un dejo a vetiver fresco tipo raíces de bosque y con una cercanía al la parte media y final de Allure Homme tradicional, pero sin la capa especiada.
La fragancia muestra una estructura centrada en una madera joven que se aparta de estándares clásicos a pesar que maneja ingredientes clásicos de un ochentero como especies, tintes de tabaco y resinas, proyectando un tono suave de intensidad media y estela de corto alcance, una tendencia que ya se ha estado repitiendo en otras fragancias. El aroma no es complejo y maneja una proporción de naranjas que le dan un corte diario agradable y bastante cotidiano, primaveral y veraniego en primera instancia por la impresión ligera que da a pesar de llevar madera y resina. En oficina destaca bastante por su estructura aromática, moviéndose como un perfume semiformal dinámico ya que es algo ligero y joven como para alcanzar niveles mayores, limpio y de imagen pulcra no intrusivo. Como aroma nocturno es grato aunque se siente al borde de quedar anulado por aromas ambientales en espacios cerrados... además el perfil que maneja es más cuidado y semiformal, de reuniones de amigos en espacios abiertos y limpios, más cercano a una casa, un restaurante o un asado que un pub. Por el lado romántico es grato por las naranjas y la capa de maderas, de imagen masculina pero... algo tiene en la intensidad que consigue sólo una proyección a medias sin muchas notas adictivas que mantengan la atención en el aroma.
En partida el aroma recuerda algunos tonos de naranja aromática con mezclas de la misma familia tipo mandarina y bergamota, en tonos no extremadamente cítricos acompañado de un aroma de madera levemente seco. En fase media el aroma no presenta grandes cambios, manteniendo los tonos de naranja y el aroma a madera seca, aunque variando el balance de notas y privilegiando a la madera por encima de las naranjas, que a esta altura también se siente seca como cáscara aromática. Se sienten pequeños tonos dulces frutales, con un dejo a vainilla y trazas especiadas. Da la idea de un tono de café fresco, no tostado, lo cual sería extraño ya que al aroma del café clásico proviene del tostado, no de la flor. Por momentos la naranja y sus similares tienden a repuntar, mostrando más riqueza a nivel de bergamotas y tonos más dulces frutales, aunque sin una gran estela. El tono dulce ya no parece vainilla, si no una mezcla entre los dulce frutales de bergamota y un dejo levemente acaramelado de pachulí, que da nuevamente un tono seco entre madera y papel con raíces. La madera alcanza un nivel suave, parecido al cedro con tabaco y con trazas dulces y puntos especiados con algunos rasgos de ámbar. A unas 6 horas de aplicado repunta nuevamente la bergamota con una inclinación a mandarina, dando unas vetas que recuerdan algo de Allure Homme Sport de Chanel. La fase final tiene bastante madera tibia y casi nada de mandarinas, con un dejo a vetiver fresco tipo raíces de bosque y con una cercanía al la parte media y final de Allure Homme tradicional, pero sin la capa especiada.
La fragancia muestra una estructura centrada en una madera joven que se aparta de estándares clásicos a pesar que maneja ingredientes clásicos de un ochentero como especies, tintes de tabaco y resinas, proyectando un tono suave de intensidad media y estela de corto alcance, una tendencia que ya se ha estado repitiendo en otras fragancias. El aroma no es complejo y maneja una proporción de naranjas que le dan un corte diario agradable y bastante cotidiano, primaveral y veraniego en primera instancia por la impresión ligera que da a pesar de llevar madera y resina. En oficina destaca bastante por su estructura aromática, moviéndose como un perfume semiformal dinámico ya que es algo ligero y joven como para alcanzar niveles mayores, limpio y de imagen pulcra no intrusivo. Como aroma nocturno es grato aunque se siente al borde de quedar anulado por aromas ambientales en espacios cerrados... además el perfil que maneja es más cuidado y semiformal, de reuniones de amigos en espacios abiertos y limpios, más cercano a una casa, un restaurante o un asado que un pub. Por el lado romántico es grato por las naranjas y la capa de maderas, de imagen masculina pero... algo tiene en la intensidad que consigue sólo una proyección a medias sin muchas notas adictivas que mantengan la atención en el aroma.
Esta fragancia de comienzos del 2009 sigue la tradición de la línea Hugo de Hugo Boss ofreciendo un perfume enfocado a gente joven con un aroma fresco no complejo y acudiendo a un objeto cotidiano para dar la forma del envase... en este caso el frasco se inspiró en una botella de oxígeno para representar la idea de frescura y de aire limpio que da la fragancia. Como nota especial, se destaca el uso intensivo y casi dominante de una nota sintética llamada "calone", que es la que da el aroma de notas marinas o agua fresca a varios perfumes. Las notas declaradas para este perfume en el sitio web de Hugo son: calone, jengibre, cilantro y cedro.
La partida de este perfume es bastante fresca e intensa, con estela de un aroma acuático algo lineal, pero con una sensación extraña que parece una nota tenue aromática amplificada y que genera mucha presencia ambiental. El tono de agua es limpio, con verdes esporádicos y sensación de una fruta al agua jugosa. En notas medias persiste el acuático pero con una tendencia de las notas verdes leves hacia los terrosos, incluso con el verde asemejando al tallo de un vegetal. Se siente la presencia del jengibre y del cilantro como las notas de tierra y verde pero con aspecto diferente a otros aromas más tradicionales de ambas notas: el jengibre no es tan notorio como en Dior Homme Sport, en las bebidas Ginger Ale o en las hojas de jengibre al vinagre de los sushis, y el cilantro no es tan aromático o puro como en otras fragancias, por ejemplo S.T. Dupont pour Homme. El aroma de calone sigue rondando esta fase casi como un aura ambiental que despierta la nariz y la mantiene alerta para seguir sintiendo aromas, aunque por momentos parece despertar algunos tonos amargos tipo loto o madera seca desde la mezcla general y a veces se siente una cruza entre un frutal tipo pera y un salado tipo alga marina. Ya en fase final el perfume sigue desprendiendo una sensación de aura aromática limpia, con notas secundarias de jengibre bastante terrosos y trazas verdes atribuibles al cilantro que se sienten amplificadas por el calone dando tonos que por momentos generan picazón en la nariz. El cedro se siente muy al fondo como una nota seca que no alcanza a amplificarse y se mezcla con la sensación de tierra.
La fragancia toma algunas similitudes con algunos predecesores de la misma línea como Hugo o Hugo Energize en la idea de una fragancia fresca y limpia, aunque con un enfoque minimalista que lo acerca más a Energize y lo aleja del Hugo original. La fragancia se siente veraniega, de uso diario en condiciones deportivas o al aire libre con una idea de limpieza que hace perdurar la frescura de la ducha matinal. En oficina destaca también la idea de limpieza a nivel social, aunque la nota acuática a veces parece escapar fuera de control y sentirse intrusiva o demasiado amplificada, siendo mejor apreciada en condiciones laborales de espacios no cerrados y de semiformal a informal. Como aroma nocturno tiene potencial por la gran estela que produce alrededor, aunque por linealidad se siente mejor en ambientes informales no exigentes como un pub o una fiesta. En el campo romántico no tiene muchas notas atractivas o seductoras, e incluso siendo algo extraña la nota acuática como para que alguien esté cerca mucho tiempo.
La partida de este perfume es bastante fresca e intensa, con estela de un aroma acuático algo lineal, pero con una sensación extraña que parece una nota tenue aromática amplificada y que genera mucha presencia ambiental. El tono de agua es limpio, con verdes esporádicos y sensación de una fruta al agua jugosa. En notas medias persiste el acuático pero con una tendencia de las notas verdes leves hacia los terrosos, incluso con el verde asemejando al tallo de un vegetal. Se siente la presencia del jengibre y del cilantro como las notas de tierra y verde pero con aspecto diferente a otros aromas más tradicionales de ambas notas: el jengibre no es tan notorio como en Dior Homme Sport, en las bebidas Ginger Ale o en las hojas de jengibre al vinagre de los sushis, y el cilantro no es tan aromático o puro como en otras fragancias, por ejemplo S.T. Dupont pour Homme. El aroma de calone sigue rondando esta fase casi como un aura ambiental que despierta la nariz y la mantiene alerta para seguir sintiendo aromas, aunque por momentos parece despertar algunos tonos amargos tipo loto o madera seca desde la mezcla general y a veces se siente una cruza entre un frutal tipo pera y un salado tipo alga marina. Ya en fase final el perfume sigue desprendiendo una sensación de aura aromática limpia, con notas secundarias de jengibre bastante terrosos y trazas verdes atribuibles al cilantro que se sienten amplificadas por el calone dando tonos que por momentos generan picazón en la nariz. El cedro se siente muy al fondo como una nota seca que no alcanza a amplificarse y se mezcla con la sensación de tierra.
La fragancia toma algunas similitudes con algunos predecesores de la misma línea como Hugo o Hugo Energize en la idea de una fragancia fresca y limpia, aunque con un enfoque minimalista que lo acerca más a Energize y lo aleja del Hugo original. La fragancia se siente veraniega, de uso diario en condiciones deportivas o al aire libre con una idea de limpieza que hace perdurar la frescura de la ducha matinal. En oficina destaca también la idea de limpieza a nivel social, aunque la nota acuática a veces parece escapar fuera de control y sentirse intrusiva o demasiado amplificada, siendo mejor apreciada en condiciones laborales de espacios no cerrados y de semiformal a informal. Como aroma nocturno tiene potencial por la gran estela que produce alrededor, aunque por linealidad se siente mejor en ambientes informales no exigentes como un pub o una fiesta. En el campo romántico no tiene muchas notas atractivas o seductoras, e incluso siendo algo extraña la nota acuática como para que alguien esté cerca mucho tiempo.
Como nota de cabeza comienza con un aroma cítrico,como naranjas suaves. Luego en las notas medias se vuelve más verde, posiblemente por una nota de mirto o arrayán que dice tener, pero no sentí notas de cardamomo. Como base la nota principal era vetiver verde, más un poco de musk.
Para mi gusto es demasiado clásico y minimalista. La fragancia recuerda mucho a las notas básicas de otras colonias, pero no agrega nada diferente o especial. Después de algunos minutos todas la notas tienden a una mezcla plana. Para usar en verano como colonia fresca de diario y oficina, ya que no es intrusiva.
Para mi gusto es demasiado clásico y minimalista. La fragancia recuerda mucho a las notas básicas de otras colonias, pero no agrega nada diferente o especial. Después de algunos minutos todas la notas tienden a una mezcla plana. Para usar en verano como colonia fresca de diario y oficina, ya que no es intrusiva.
Esta fragancia de mediados del año 2010 aparece en el mercado 1 año después de Zegna Colonia y siguiendo una línea diferente a su predecesor directo, con un aroma que marca el encuentro de dos mundos representados por tonos de agua de colonia propios de la herencia italiana de la marca y por líneas de tabaco con miel y maderas más afines con el estilo moderno del hombre urbano. El envase repite la misma forma de botelal que ha sido usada por Essenza di Zegna, Zegna Intenso y Zegna Colonia, cambiando el colorido del vidrio a un degradado que va de un gris ahumado a transparente en la base. En el sitio de Zegna destacan las siguientes notas aromáticas para este perfume: pimienta rosada, jengibre, cáscara de limón, cáscara de pomelo, hojas de tabaco, miel y granos de tonka.
En partida la fragancia muestra líneas diferentes a los mediterráneos de sus predecesores, con puntos amaderados que llegan a ideas de chocolate y destacando puntos vegetales que incluso rozan los florales de jazmín con vetas de pachulí, con tonos vagos y muy imprecisos de cítricos de baja aromaticidad que se acercan a bergamotas. En fase media a 40 minutos la línea de chocolate con pachulí se afina en torno a tabaco dulce con incorporación de grupos terrosos que en principio se acercan a maderas con canela y dejos fríos de ámbar también dulce, afinando un punto especiado mesurado más ligero que una pimienta y cercano a cáscara de nuez moscada con jengibre, con oscilaciones de líneas verdes que se aproximan a salvia, aceite de pimienta o cáscara de pomelo amarga al llegar a 1 hora de aplicado, dando un recuerdo vago del concepto de aroma dual agresivo usado en Zegna Intenso, manteniendo tonos tibios de ámbar con una base más cercana a pimienta hacia el fondo y puntos confitados tipo garrapiñadas de maní o almendras a las 2 horas. A partir de las 4 horas parte de las vetas verdes da un giro hacia savia de plantas alejada de la idea de salvia y más cercanas a un jabón neutro, bajando el tono chispeante de jengibre que se apaga hacia las 6 horas en favor de tibios sucios de tonka que arrastran porciones de plástico quemado con resina, con la mezcla tomando un aspecto más atalcado parecido a violetas secas con lavanda e iris que favorece la aparición de pequeños alimonados alrededor de las 7 horas después de aplicado que complementan los tibios sucios casi sintéticos de tonka. Sobre las 9 horas el grano de tonka mantiene su evolución con rasgos plásticos intercalados que se abren primero hacia madera de arbustos y luego hacia tabaco dulce aromatizado con canela y miel, agregando puntos de hule con alimonados suaves al llegar a las 12 horas. En fase final a 24 horas la fragancia retorna hacia cítricos frescos ahora más marcados y que comparten espacio con resinas turbias que absorben la mayoría de las vetas adicionales, con los tonos de salvia pasando a plástico ahumado y los dejos de talco al iris cruzándose con licorosos de pachulí tipo hule.
La fragancia parece desligarse de las líneas de colonia clásica mediterránea establecida en perfumes anteriores, enfocándose ahora hacia una intención más urbana y personal con cierto grado de desenfado, donde la denominación Forte apunta más a personalidad que a intensidad, con una proyección que al menos en el escenario de diario todavía calza en gran parte de las épocas calurosas de la primavera y el verano y haciendo una apertura hacia épocas más frías del otoño pudiendo llegar a un invierno en interiores con un corte de tipo semiformal no deportivo, mostrando indiferencia si se usa en solitario o con intenciones sociales. En oficina la fragancia es capaz de mantener una cara seria y con una profundidad aromática suficiente en torno a las resinas, con un efecto memoria mediano debido a un aspecto general oscuro de las notas que disminuye parte de su desplante, tendiendo a aprovecharse mejor en épocas frías donde el punto de resina tiene menores posibilidades de ahogar, con una imagen semiformal sin corbata que se mantiene en un punto medio entre una personalidad dinámica y una reposada. Por el lado nocturno el aroma tiene puntos sucios afines con locales concurridos con bastante gente, tal vez optando por círculos sociales más pequeños e íntimos para que el aroma pueda se apreciado de mejor forma, evitando los extremos informales de fiesta y formales de gala por los cruces plásticos del grano de tonka que pueden sentirse fuera de lugar. En lo romántico la fragancia puede resultar chocante por momentos a corta distancia, sintiéndose como una opción de aroma personal para destacar pero sin concretar una conversación.
En partida la fragancia muestra líneas diferentes a los mediterráneos de sus predecesores, con puntos amaderados que llegan a ideas de chocolate y destacando puntos vegetales que incluso rozan los florales de jazmín con vetas de pachulí, con tonos vagos y muy imprecisos de cítricos de baja aromaticidad que se acercan a bergamotas. En fase media a 40 minutos la línea de chocolate con pachulí se afina en torno a tabaco dulce con incorporación de grupos terrosos que en principio se acercan a maderas con canela y dejos fríos de ámbar también dulce, afinando un punto especiado mesurado más ligero que una pimienta y cercano a cáscara de nuez moscada con jengibre, con oscilaciones de líneas verdes que se aproximan a salvia, aceite de pimienta o cáscara de pomelo amarga al llegar a 1 hora de aplicado, dando un recuerdo vago del concepto de aroma dual agresivo usado en Zegna Intenso, manteniendo tonos tibios de ámbar con una base más cercana a pimienta hacia el fondo y puntos confitados tipo garrapiñadas de maní o almendras a las 2 horas. A partir de las 4 horas parte de las vetas verdes da un giro hacia savia de plantas alejada de la idea de salvia y más cercanas a un jabón neutro, bajando el tono chispeante de jengibre que se apaga hacia las 6 horas en favor de tibios sucios de tonka que arrastran porciones de plástico quemado con resina, con la mezcla tomando un aspecto más atalcado parecido a violetas secas con lavanda e iris que favorece la aparición de pequeños alimonados alrededor de las 7 horas después de aplicado que complementan los tibios sucios casi sintéticos de tonka. Sobre las 9 horas el grano de tonka mantiene su evolución con rasgos plásticos intercalados que se abren primero hacia madera de arbustos y luego hacia tabaco dulce aromatizado con canela y miel, agregando puntos de hule con alimonados suaves al llegar a las 12 horas. En fase final a 24 horas la fragancia retorna hacia cítricos frescos ahora más marcados y que comparten espacio con resinas turbias que absorben la mayoría de las vetas adicionales, con los tonos de salvia pasando a plástico ahumado y los dejos de talco al iris cruzándose con licorosos de pachulí tipo hule.
La fragancia parece desligarse de las líneas de colonia clásica mediterránea establecida en perfumes anteriores, enfocándose ahora hacia una intención más urbana y personal con cierto grado de desenfado, donde la denominación Forte apunta más a personalidad que a intensidad, con una proyección que al menos en el escenario de diario todavía calza en gran parte de las épocas calurosas de la primavera y el verano y haciendo una apertura hacia épocas más frías del otoño pudiendo llegar a un invierno en interiores con un corte de tipo semiformal no deportivo, mostrando indiferencia si se usa en solitario o con intenciones sociales. En oficina la fragancia es capaz de mantener una cara seria y con una profundidad aromática suficiente en torno a las resinas, con un efecto memoria mediano debido a un aspecto general oscuro de las notas que disminuye parte de su desplante, tendiendo a aprovecharse mejor en épocas frías donde el punto de resina tiene menores posibilidades de ahogar, con una imagen semiformal sin corbata que se mantiene en un punto medio entre una personalidad dinámica y una reposada. Por el lado nocturno el aroma tiene puntos sucios afines con locales concurridos con bastante gente, tal vez optando por círculos sociales más pequeños e íntimos para que el aroma pueda se apreciado de mejor forma, evitando los extremos informales de fiesta y formales de gala por los cruces plásticos del grano de tonka que pueden sentirse fuera de lugar. En lo romántico la fragancia puede resultar chocante por momentos a corta distancia, sintiéndose como una opción de aroma personal para destacar pero sin concretar una conversación.
Partida fresca, de cítricos pero no ácida, aunque no se siente un aroma puro distinguible a naranjas o limones (leí que es mandarina verde, con algo de limón y frutos rojos). Aunque mezclada con alcohol, esta nota de cabeza duró en estado puro menos de 5 minutos, luego aparecieron las notas medias, algo especiadas suaves pero con un dejo notorio a una flor (pensé que geranio, pero al parecer es iris... el especiado me recordó al Essenza di Zegna). Dentro de la hora siguiente la flor se hizo más notoria y aparecieron otras especies, posiblemente pimienta o cardamomo suave, pero me dejó la sensación del mismo aroma de una fragancia que ya había probado antes (la que tampoco recuerdo, lo que me da más la sensación de algo promedio o genérico, al parecer por una nota tradicional de vetiver). Aproximadamente 2 horas después de la primera aplicación se sienten algunas notas de base algo orientales de tonka mezcladas con la nota de flor y ciertas notas dulces de ámbar (que se hacían notar esporádicamente desde la nota media). Una sensación maderosa suave y a veces terrosa (por el iris), posiblemente sándalo, cedro y musk, con apariciones de ámbar al oler intensamente sobre la piel, es lo queda al momento de escribir esta opinión, unas 7 horas y media después de aplicado en la piel.
Si bien es agradable, fresco sin llegar a ser oriental y la fijación en piel es buena (se sigue sintiendo casi 8 horas después de aplicado y solo con 1 spray sobre la piel), no tiene mezclas de notas especiales que lo hagan único y reconocible y tiende a ser una fragancia tradicional. De uso diario o de oficina, posiblemente para la noche en eventos simples. Funciona en verano por la partida fresca y también en invierno por las notas dominantes de tonka, iris y ámbar (esto fue a propósito, fue estructurado en "claroscuro" para mostrar 2 facetas aromáticas opuestas: una fresca luminosa y una terrosa oscura).
Twitter: @molinajorgel
Fan Page: https://www.facebook.com/Tendenciabyjm
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